El sustrato del terrario es una de las partes a las que debemos prestar más atención ya que sobre él vivirán los futuros inquilinos. Hay mucha gente que no le da importancia, pero en nuestro caso supone una de las partes fundamentales.
Un sustrato no adecuado puede ser foco de infecciones, malos olores y demás cosas que, más o menos molestas, en el peor de los casos pueden resultar dañinas a nuestros pequeños huéspedes.